José Ricardo Castellanos gana Premio Nacional de Dramaturgia Universitaria Hugo Salcedo 2024

Un estudiante y su profesor se encuentran donde no esperaban, en un punto clandestino donde se compra droga. Ese suceso desencadena la trama de la obra de teatro Época, escrita por José Ricardo Castellanos Infante.

Dicho estudiante de la licenciatura en Literatura Dramática y Teatro de la UNAM fue anunciado como el ganador de la cuarta edición del Premio Nacional de Dramaturgia Universitaria Hugo Salcedo 2024, que entrega el Centro Universitario del Sur (CUSur) de la Universidad de Guadalajara (UdeG).

Este viernes, en rueda de prensa fue anunciado que Época destacó por su estructura dramática, su pertinencia temática, su riesgo y búsqueda de propuesta.

“Es una obra abstracta que juega con el tiempo. Se llama Época porque hay una mezcla de sucesos históricos que buscan desenterrar del olvido; la obra juega con las compras del pasado que nos atormentan. La obra busca entrelazarse en el laberinto del tiempo y las cicatrices históricas, sociales, políticas y personales de cómo llegamos a herir y ser heridos. Hay una búsqueda de la herida, la pasión, la esperanza y desesperanza”, explicó el ganador.

Dicho texto dramatúrgico también aborda las violencias en las zonas militares, así como la situación del narco, así como la desmemoria. “Es un tema delicado y trato de representarlo desde una perspectiva irónica, tal vez”, añadió.

“La droga de la historia hace que se conciba el tiempo de otras maneras no hegemónicas, por así decirlo, tanto el tiempo climático, también el tiempo de las horas que pasan; un pestañeo pueden ser cinco años o bien un largo adiós puede ser un pestañeo; pero también el tiempo histórico, el de épocas, hay anacronismos”, indicó.

Este joven autor de 25 años, que este viernes 13 de septiembre es su cumpleaños, añadió que este premio es una grata coincidencia y un gran regalo que lo motiva a seguirse preparando en su carrera como dramaturgo.

La maestra Fátima Paola Arias Álvarez, Presidenta del jurado, dijo que la obra ganadora “es una propuesta que fomenta un espacio para el desarrollo de la dramaturgia universitaria, atiende problemas del presente bajo un tratamiento innovador y poético”.

“Y propone una estructura redonda, una atención construida por acciones que genera un imaginario teatral. Los personajes proponen una plastilina que invita a jugar desde diversos niveles simbólicos, una farsa trágica que logra sostener el ritmo por el tenaz manejo de la urgencia en su texto y una gramática también eficaz”, abundó.

“El modo en que está escrita realmente es casi impecable”, destacó Arias Álvarez. 

El Rector del CUSur, doctor José Guadalupe Salazar Estrada, recalcó que el Premio Nacional de Dramaturgia Universitaria Hugo Salcedo es un incentivo para estimular la creación dramatúrgica de estudiantes de pregrado y posgrado; por lo que se dice congratulado de que ha crecido la cantidad de trabajos participantes. 

“En 2016 arrancó el premio con 19 trabajos de la república mexicana. En la convocatoria 2017-2018 se recibieron diez trabajos, de siete estados. En 2021 tuvimos 24 trabajos, de siete estados. Y en esta edición 2024 recibimos 34 trabajos, de 18 ciudades, de diez entidades, con la participación de 15 instituciones universitarias de México y Argentina”, detalló.

Mencionó que el premio consiste en 50 mil pesos en efectivo (menos impuestos), así como los viáticos del viaje para que el ganador asista a la ceremonia de reconocimiento que será el 24 de septiembre, a las 18:00 horas, en la Casa del Arte del CUSur en Ciudad Guzmán. 

El Director de la División de Ciencias Sociales y Humanidades, doctor José Alejandro Juárez González, recordó que el premio lleva el nombre de Hugo Salcedo, dramaturgo originario de Zapotlán el Grande, quien es reconocido nacional  e internacionalmente.

Atentamente
“Piensa y Trabaja”
“30 Años de la Autonomía de la Universidad de Guadalajara y de su organización en Red”
Ciudad Guzmán, municipio de Zapotlán el Grande, Jalisco, 13 de septiembre de 2024

Texto: Iván Serrano Jauregui
 

Fotografías: Abraham Aréchiga